Muchas veces la gente piensa que en los pueblos la moda pasa desapercibida, sobre todo si hablamos entre los jóvenes. Yo, un mero observador y habitante de un bonito y acogedor pueblo llamado Villanueva del Fresno día tras día, veo como muchas de las mujeres y hombres, quizás hasta sin darse cuenta, generan una moda que sorprende con su elegancia y sencillez, las claves que a mi personalmente tanto me gustan. Hoy visitaba un cortijo de 1874, El cortijo de Doña Maria, en el cual habita ahora uno de sus descendientes. En el podía ver belleza, elegancia y sobre todo costumbre.
Tal vez solo sean tópicos que la sociedad nos ha intencionado otorgar a la gente que vive en los pueblos, pero...
¿Ha venido esa gente alguna a un pueblo?
Cuando andaba por las habitaciones del cortijo, Alvaro, uno de sus descendiente, me hablaba de las experiencias que había vivido en él junto a su familia y amigos, de su infancia, y también me contaba la historia que envuelve la creación del cortijo y como sus antepasados le fueron dando forma a la hora del interiorismo.
Mi propósito en este nuevo proyecto que voy a llevar a cabo, es ofrecer a la gente, la posibilidad de que vean como la moda no solo rinde honores en las grandes ciudades y pasarelas, si no que esta presente en miles de nuevas y antiguas formas en los pueblos, en sus casas, en sus calles...
Así, comienzo un nuevo camino, donde iré descubriendo todo aquello que pueda dar un toque fresco y de recuerdo, tanto para nuestras casas, como en nuestra forma de vestir, por que Renata is Fashion no es un mero blog de moda, es algo mas que ello, son sueños e ilusiones y sobre todo es una nueva forma de ver el mundo en el que me quiero mover y que solo encontraré si busco desde mis principios, desde mi cuna, desde mi pueblo.
Aquí un retrato de su primera dueña.
Las habitaciones escondían recuerdos, risas y llantos, escondían sentimientos.
Tras las ventanas las dehesas de nuestra bonita Extremadura.
Los patios estaban repletos de vida y color.
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